viernes, 20 de enero de 2017

Práctica budista sin un maestro (practicante solitario).

Muchos maestros, tradiciones, libros, etc, dicen que uno debe realizar la  práctica budista bajo la dirección de un maestro ordenado. Tener la guía de un maestro es la manera más segura y correcta de llevar una debida práctica del Dhamma.

Practicar solo incluso puede conllevar algunos peligros en cuanto a aumentar el ego, fortalecer el yo o ingresar en estados mentales vulnerables en los cuales una persona maliciosa puede ejercer control sobre el practicante.

Sin embargo para algunos no es tan sencillo. Algunos vivimos en países cristianizados en los cuales no hay templos ni monjes.

Vivir en un país en donde lo único que se conoce sobre budismo es lo que muestran en las películas de Hollywood, tiende a desanimar un poco. Las personas interesadas buscan con ansias una ayuda y guía por medio del ordenador. Es importante advertir sobre los peligros que conlleva buscar un maestro hoy en día, así que antes de hablar de la práctica sin maestro, observaremos un par de puntos importantes sobre los peligros de buscar un maestro en internet.

Peligros de buscar un maestro en internet.

Internet es la primera y principal opción para conseguir la mayor cantidad de información posible, pero esto también trae muchas posibilidades de perderse en el camino equivocado ya que la mayoría de opciones budistas que se nos ofrecen por la red viene de personas occidentales que en realidad no han hecho un estudio profundo del Dhamma y solo han investigado lo suficiente para reclutar adeptos ansiosos de ser liderados. Estas personas suelen promocionarse en una población específica de la sociedad (clase media-alta y alta), y cobrar unas absurdas sumas de dinero por talleres, cursos y retiros en lugares apartados y elegantes con toda la comodidad. Estos maestros falsos vienen ordenados dentro de una tradición específica. Muchos vienen ordenados por monjes del Tíbet pero también están los que se ordenan en Japón en escuelas del Zen. También habrá los que se ordenaron en algún país del sudeste asiático o cualquier otro país budista pero estos dos son los más frecuentes. De igual manera, muchos orientales que ven una mina de oro en la ignorancia y la ingenuidad occidental también hacen todo un comercio de ello. No todo el que lleve una túnica y recite suttas es un ser iluminado. El Buda es muy claro sobre esta advertencia.

El contaminado que vestirá la túnica amarilla, carente de control y veracidad, ése no merece la túnica amarilla.

(Verso No 9 – DHAMMAPADA)

¿Cómo saber si un maestro es falso? La primera pista es la más obvia, el dinero. Una persona que vende servicios espirituales a un sector específico y privilegiado de la sociedad es claramente un charlatán. El budismo no es una práctica elitista. Buda se enfrentó abiertamente a ello al rechazar totalmente el sistema de castas de la India, ofreciendo el Dhamma sin ninguna distinción ni exigiendo pago alguno.

Es cierto que los templos y los monjes necesitan ingresos y sustento, y que los laicos debemos ayudar a la sostenibilidad de ello. Pero no hay que ser ingenuos. Una persona que pone cuotas fijas y altas, que no se promociona abiertamente sino de formas exclusivas y que hace demasiado énfasis en sus conocimientos, su escuela, su linaje (algunos hasta promocionan poderes sobrenaturales), y que procura minimizar el valor del dinero maximizando el valor de sus enseñanzas, seguramente no será más que un charlatán con un título espiritual conseguido en oriente.

Es importante ser claros en este punto. Las ordenaciones y los linajes pueden ser reales. La persona realmente puede ser un monje ordenado que pudo haber estado alguna cantidad de años en un país budista aprendiendo con un famoso maestro oriental en un templo. Estas credenciales pueden ser ciertas, pero esto no es garantía de que ésta persona sea en realidad un maestro budista. Aun así, puede ser un charlatán. Entre más se apoye en su linaje y su título, más posible es que sea un falso maestro. Personas importantes en el Dhamma como el Bhikkhu Khantipalo resaltan esta advertencia sobre estos maestros ordenados. Tanto occidentales como orientales. 

Oriente también está repleto de monjes budistas falsos que solo buscan lucrarse y no dudarán dos veces en aliarse con un occidental para montar una empresa de turismo occidental. Recordemos que para oriente, occidente no es más que la tierra del dinero y el poder, y como bien dijo el Buda, no todo el que use la túnica amarilla es digno de merecerla.

En internet también hay gente que se proyecta a sí misma como un laico sumamente instruido que ha leído y estudiado los Suttas de manera tan profunda como un maestro. Éstos terminan rayando en el academicismo o mezclando el Dhamma con doctrinas diversas, creencias teístas y hasta teorías metafísicas. Estas guías exóticas son tan superficiales como el mismo google que tiene respuestas para todo pero que  carece de conocimiento y de la profundidad de alguien que en realidad se dedica a estudiar el Dhamma. 

En cuanto a los maestros budistas genuinos, hay que decir que no es posible la instrucción con un maestro a través del internet. Es posible la ayuda y el apoyo de una comunidad virtual. Pero las enseñanzas de un maestro siempre deben ser transmitidas en persona. Es más, no es bueno aferrarse al primer maestro budista que uno tenga al alcance. El maestro Sheng Yeng de Taiwan, uno de los maestros budistas más grandes que alcanzó a conocer el siglo XXI,  también advierte sobre esto. No todos los maestros budistas le sirven a todo practicante. Uno debe probar y buscar el maestro adecuado para uno ya que hay diferentes maestros para diferentes personas, eso sin contar las distintas tradiciones y escuelas. El maestro Yeng pone el ejemplo de que el maestro debe ser probado como un bastón. Mirar cómo le ayuda al caminar, y si no se siente un paso seguro, debe dejarlo y buscar otro. Obviamente esto complica más la situación para las personas que no viven en países budistas, pero la sed de guía puede alejarnos del Dhamma en lugar de llevarnos a él.

PRÁCTICA BUDISTA SIN MAESTRO.

¿Es estricta y absolutamente necesario tener un maestro para practicar el Dhamma? No. Y guías del Dhamma de la talla del maestro Sheng Yen lo afirman. Si así fuera, el Dhamma no sería universal y solo se limitaría a las zonas de influencia de los monasterios.

Una persona de un país latinoamericano en donde difícilmente habrá un templo, no tiene acceso a un maestro. Por consiguiente no debe dejarse determinar por las circunstancias y aprovechar todas las ventajas que tenga a su alcance para estudiar el Dhamma. Además de eso hay que recordar que todos los budistas del mundo tenemos un mismo maestro. Buda Shakyamuni. Y en él debemos refugiarnos a través de sus enseñanzas.

Es cierto que hay que estudiar y practicar con más esfuerzo que alguien que tiene la suerte de tener cerca un maestro y un templo. Nosotros estamos a ciegas, y nuestra única luz es el Buda y sus enseñanzas. Esto quiere decir que para los practicantes solitarios el camino será sólo un poco más largo, pero es el mismo. 

Las personas de ésta era han tenido la mala suerte de vivir en el tiempo de la comunicación electrónica. Esto les ha acostumbrado a la gratificación instantánea, lo cual es un gran problema para realizar la práctica del budismo. La gente suele entrar a internet para conseguir una respuesta absoluta de un día para otro y sin el menor esfuerzo. Han sido programados para frustrarse al menor desafío. En este sentido uno suele medir el budismo con preguntas capciosas evaluando si de verdad vale la pena o no invertir mi tiempo en este producto. 

Olvídese de las respuestas absolutas. De los remedios instantáneos y de las recetas milagrosas. Si lo que busca son soluciones inmediatas, ésta no es una opción para usted. 

Los estadounidenses nos han vendido esta idea tonta de que las cosas deben venir de manera hecha, resumida, sintética, ya lista para destapar y consumir sin necesidad de pensar ni esforzarse. Cuando uno entra a buscar sobre religiones, muchas veces entra así. Ni el budismo, ni ninguna religión ni filosofía de vida es así. No es un manual para resolver los problemas personales siguiendo una serie de pasos sencillos. Es una guía de entrenamiento que funciona según el uso que se le dé y la disciplina que se le dedique. Antes de iniciar  la práctica, hay que tener eso claro.

¿Cómo usar internet? Las siguientes son recomendaciones para gente que ya buscó templos cerca de su casa y comprobó que no existe ninguno a su alcance. 

Olvídese de los foros. Lo primero que uno hace es meterse en grupos de Facebook. Los grupos de Facebook son una excelente opción para compartir experiencias y hacer contactos, pero es una mala, malísima opción para buscar información útil y fidedigna a cerca de la práctica del Dhamma. Los foros y las redes sociales como Facebook están repletos de gente como usted, de gente que está buscando respuestas. Y también de gente que cree que tiene todas las respuestas. Nunca falta el erudito que piensa que porque leyó las cuatro nobles verdades, el camino óctuple, la biografía de Buda y un par de Suttas ya lo sabe todo. Además hay que tener en cuenta que en realidad, un maestro budista no se va a hacer una cuenta de Facebook ni de Twitter a menos que esté vendiendo exclusivos talleres y retiros para los que hay que ahorrar un semestre entero. 

Contacte una Sangha. Hay grupos en Facebook que son de Sanghas ya establecidas con sus monjes o monjas y templos. Estos son la mejor opción ya que se pueden pedir recomendaciones de gente que sí tiene maestro y realiza una práctica diaria dentro de una comunidad y una tradición. De todas maneras hay que tener en cuenta que las Sanghas tienen sus modos de acuerdo a su tradición y escuela, la cual puede no ser la que en realidad le sirva a uno. El budismo también es diverso. Sin embargo siempre es una mejor opción en lugar de un montón de civiles perdidos buscando el Dhamma en google. 

Buscar fuentes genuinas e información legítima. Lo primero que uno debe hacer cuando va a practicar el budismo sin maestro, es conseguir todos los Suttas (o Sutras) que le sean posibles. Descargarlos,  y si es posible imprimirlos y empastarlos. Tenerlos cerca. Algunos Sutras fueron tomados de las propias palabras de Buda (Canon Pali). Otros son interpretaciones o re interpretaciones que hicieron grandes maestros al fundar sus tradiciones y escuelas. Cualquier Sutra es una buena ayuda para empezar a comprender el budismo. Con el tiempo, usted se irá ubicando dentro del variado mundo del budismo y sabrá elegir la tradición o escuela budista que más beneficios le traiga. Es cuestión de estudio y tiempo. 

Tener claros los fundamentos. Las cuatro nobles verdades, el noble camino óctuple, los conceptos de originación dependiente, interdependencia, vacuidad, impermanencia, una técnica básica de meditación y adoptar la meditación como una práctica diaria. Estos son elementos básicos para la práctica. Con el tiempo usted va a ir profundizando su entendimiento de estos conceptos y de la práctica de la meditación. No hay que frustrarse si al principio se confunde un poco. Estos fundamentos son claves para la práctica del budismo. Dedíqueles tiempo. 

Leer. Recordando la falencia de nuestros días, la búsqueda de gratificación instantánea, la pereza mental es un gran impedimento para la práctica del budismo. Hay que leer. Es decir, hay que estudiar textos de una extensión y sustento mayores a los que consume una persona que está acostumbrada a leer textos cortos y sintéticos de poca exigencia. Internet no sirve. Como se suele decir, internet es un océano de información con un centímetro de profundidad. La única manera de que internet sirva es descargando libros y leerlos completos. La información de internet en realidad es muy inexacta, incompleta, confusa y la mayoría de las veces errónea. Otra ventaja del budismo es que inculca el hábito de lectura y promueve el ejercicio de la comprensión de conceptos, mejorando la inteligencia y aumentando la velocidad la capacidad de respuesta. Una persona a la que no le guste leer, no podrá aprovechar plenamente los beneficios de las enseñanzas budistas. 

Además de los Suttas, hay que leer libros de maestros reconocidos que escriben pensando en personas de países occidentales que tienen muy poca información a la mano sobre budismo. Los libros de Tenzin Gyatso, S.S. el Dalai Lama son excelentes para los practicantes solitarios que inician su estudio budista. A veces aborda discusiones entre las distintas escuelas tibetanas y argumentos filosóficos que hay entre ellas pero no hay por qué sentirse perdido. No preste mucha atención a esas partes y enfóquese más en las recomendaciones para la vida diaria. 

Los libros del maestro Tich Nhant Han y sus charlas en vídeo. Es budismo para este lado del mundo, un excelente material para los budistas occidentales. Los videos del maestro Sheng Yen del Gran tambor del Dharma cubren una amplia variedad de temas de la vida diaria para los budistas laicos de una manera clara y llena de sabiduría. Los escritos del Bhikkhu Khantipalo son totalmente recomendables. De hecho hay una conferencia que realizó en 1995 sobre la práctica laica bastante útil, así como sus otras charlas.

A medida que valla creciendo su biblioteca de estudio, usted va a ir encontrando material realmente útil de fuentes confiables que lo llevarán en la dirección correcta. Hay muchos otros maestros con información útil y clara para las personas de Latinoamérica y demás regiones no budistas. 

Conozca al Buda. Conozca la biografía de Buda. La historia de la vida de Siddhartha Gautama está llena de sabiduría, leyenda, magia y belleza. Es una historia mágica y muy interesante. Perfecta para iniciar a los más pequeños en las enseñanzas. También es de mucha utilidad conocer las distintas expresiones del budismo alrededor del mundo. 

Meditación y estudio. Son puntos a reiterar. Estas dos herramientas son fundamentales, claves y básicas para iniciarse en el budismo. Instrúyase sobre la meditación, pero una vez más, cerciorándose de aprender de fuentes confiables. 

Es necesario considerar nuevamente el asunto de los foros, ya que seguramente uno de ellos le ha permitido conocer ésta información. Lo más conveniente es echarles un vistazo cuando ya se tiene más o menos un una idea real de lo que se trata el budismo, es decir cuando ya se tiene un hábito de estudio, y aun así hay que escogerlos bien. Por lo general los grupos budistas en las redes sociales son una tormenta de confusiones y dudas. 

Una gran ventaja que pueden brindar los foros es ubicarlos en su mismo lugar de residencia con la finalidad de encontrar a otros budistas o nuevos practicantes cerca de usted con el objetivo de compartir en persona. El estudio en compañía es una ventaja enorme para un budista en un país ajeno al budismo. Éste es sin dudas el mejor provecho que se puede obtener de los foros. Tener la posibilidad de crear un grupo con el cual reunirse a compartir, a aprender y a practicar. Con suerte, usted podrá formar la primera Sangha budista en su ciudad. 

Para resolver más dudas o tratar más temas relacionados, no dude en escribir y comentar. El Dhamma está realmente vivo cuando se comparte. 



6 comentarios:

  1. Muchas gracias. Todo esto es muy útil para mí. Hace mucho tiempo que tenía esta inquietud, de "por dónde empezar" y claramente por internet era muy difícil de poder ver claramente. Me ha ayudado mucho leer su blog. Gracias.

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  2. Muchas Gracias! Sin duda una gran guía todo tu blog. Saludos!

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  3. Muchísimas gracias por este post y este blog. Respondo al grupo de quienes vivimos en occidente, en un país sudamericano (Argentina), en una provincia mediterranea, lejos de la capital y en un pueblo de la misma lejos a su vez de su capital... sin templos, monjes, maestros ni sanghas... Pero con muchos deseos... UNa luz en el camino este post. GRACIAS

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  4. Hola!!! Yo practiqué budismo Nichiren desde mi adolescencia y durante varios años. Luego, me alejé de esa organización. Ahora, hay información por demás, y, hay que tener criterioy sentido común. En aquella época ni siquiera existía Internet; era muy chica y no me hacía cuestionamientos. Gracias por compartir. Saludos.

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